Colecistitis, Colelitiasis y Pancreatitis

TRASTORNOS DE LA VESICULA BILIAR
Varios trastornos afectan al sistema biliar e interfieren con el drenaje normal de bilis al duodeno. Estos trastornos incluyen inflamación del sistema biliar y carcinoma que obstruye al árbol biliar. (C. Smelter, G. Bare, L. Hinkle, & H. Chver, 2012)
Colecistitis
La colecistitis, la inflamación aguda de la vesícula biliar, causa dolor y rigidez a la palpación del abdomen superior derecho; este dolor puede irradiarse al área medio esternal u hombro derecho y se asocia con nauseas, vomito y los signos usuales de una infamación aguda. Se desarrolla empiema de la vesícula biliar si esta se llena con líquido purulento (pus). (C. Smelter, G. Bare, L. Hinkle, & H. Chver, 2012)
La colecistitis calculosa es la causa de más de 90% de casos de colecistitis aguda. En la colecistitis calculosa, un cálculo biliar obstruye el flujo de salida. La bilis remanente en la vesícula biliar inicia una reacción química; ocurren autolisis y edema, y los vasos sanguíneos vesiculares. (C. Smelter, G. Bare, L. Hinkle, & H. Chver, 2012)
Se produce engrosamiento  y encogimiento de las paredes de la vesícula biliar la cual pierde la capacidad para desempeñar su función de concentrar y almacenar bilis. La  mayor incidencia ocurre entre los 50 y 70 años. Aparece con mayor frecuencia en las mujeres. (Biblioteca Nacional de Medicina de los EE. UU., 2016)
Los signos y síntomas:
·                       Dolor intenso y constante en la parte superior derecha de su abdomen
·                       Dolor que se irradia desde el abdomen hasta el hombro derecho o la espalda
·                       Sensibilidad en el abdomen cuando se ha tocado
·                       Transpiración
·                       Náusea y vómitos
·                       Fiebre
·                       Escalofríos
·                       Distensión abdominal
Los signos y síntomas de la colecistitis suelen ocurrir después de una comida, especialmente una comida grande o de una comida rica en grasa. (Biblioteca Nacional de Medicina de los EE. UU., 2016)
Diagnóstico:
La colecistitis aguda suele producir dolor en cuadrante superior derecho persistente, típico en la exploración física por el médico. Junto a la historia clínica y la exploración física, el diagnóstico suele confirmarse mediante la ecografía abdominal. Actualmente es muy frecuente, ante la clara sospecha de litiasis biliar, la realización de la ecografía por laparoscopia intraoperatoria, que permite la extirpación de la vesícula biliar si se confirma el diagnóstico en la misma operación. (Biblioteca Nacional de Medicina de los EE. UU., 2016)
En casos en los que mediante la ecografía no es posible confirmar el diagnóstico, puede ser necesario realizar otras pruebas complementarias como el estudio con contraste de las vías biliares (colangiografía). (Biblioteca Nacional de Medicina de los EE. UU., 2016)
El tratamiento:
Los tratamientos pueden incluir:
§Ayuno. Es posible que no se le permitirá comer o beber en un primer momento a fin de tener el estrés fuera de la vesícula inflamada. Para que no se deshidrate, puede recibir líquidos por vía intravenosa en el brazo. (Biblioteca Nacional de Medicina de los EE. UU., 2016)
§Antibióticos para combatir infecciones. Si su colecistitis es causada por una infección o ha causado una infección en la vesícula, el médico puede recomendar antibióticos para tratar la infección. (Biblioteca Nacional de Medicina de los EE. UU., 2016)
§Medicamentos para el dolor. Usted puede recibir medicamentos para el dolor para ayudar a controlar el dolor hasta que la inflamación en la vesícula biliar se alivia. (Biblioteca Nacional de Medicina de los EE. UU., 2016)




Colelitiasis
Los cálculos biliares se forman por lo común en la vesícula biliar, a partir de los constituyentes solidos de la bilis; varían mucho en tamaño, forma y composición. Son ratos en los niños y adultos jóvenes, pero vuelven más prevalentes con aumento de la edad, y afectan de 30 a 40% de las personas alrededor de los 80 años de edad. (C. Smelter, G. Bare, L. Hinkle, & H. Chver, 2012)
Fisiopatología
Hay dos tipos importantes de cálculos biliares; los compuestos de manera predominante de pigmento y aquellos primordialmente de colesterol. El riesgo de desarrollar tales cálculos los aumenta pacientes con cirrosis, hemolisis e infecciones del sistema biliar. Los cálculos de pigmento no se pueden disolver y se deben eliminar quirúrgicamente. (C. Smelter, G. Bare, L. Hinkle, & H. Chver, 2012)
Factores de riesgo:
ü     Obesidad
ü     Mujeres en especial con múltiples embarazos
ü     Cambios frecuentes en el peso
ü     Rápida pérdida de peso (ocasiona un desarrollo de cálculos y riesgos elevados de enfermedad asintomática)
ü     Tratamiento con dosis elevada de estrógenos (p. ej. En cáncer de próstata)
ü     Resección ileal o enfermedad
ü     Fibrosis quística
ü     Diabetes mellitus
Manifestaciones clínicas
Los cálculos biliares pueden ser silenciosos, indoloros y limitarse a causar los síntomas gastrointestinales leves. Se puede detectar de manera incidental durante una intervención quirúrgica o evaluación de problemas no relacionados.  (C. Smelter, G. Bare, L. Hinkle, & H. Chver, 2012)
Dolor y cólico biliar:  si un cálculo biliar obstruye el conducto cístico, la vesícula biliar se distiende, de inflama y tardo o temprano se infecta (colecistitis aguda). El paciente desarrolla un cuadro clínico de colecistitis.  (C. Smelter, G. Bare, L. Hinkle, & H. Chver, 2012)
Ictericia: ocurre ictericia en algunos pacientes con colecistopatía, por lo general, con obstrucción del colédoco. La bilis, que ya no llega al duodeno, es absorbida por la sangre y da la piel y las membranas mucosas un color amarillo. Esto se acompaña con frecuencia de prurito marcado (comezón) de la piel.  (C. Smelter, G. Bare, L. Hinkle, & H. Chver, 2012)
Cambios en el color de la orina y heces: excreción de pigmentos biliares orlos riñones da a la orina un color muy oscuro. Las heces, no coloreadas ya con los pigmentos biliares, son grisáceas, como masilla o color arcilla.  (C. Smelter, G. Bare, L. Hinkle, & H. Chver, 2012)
Deficiencia vitamínica: la obstrucción del flujo de la bilis interfieres con la absorción de las vitaminas liposolubles A, D, E y K. los pacientes pueden mostrar deficiencias e esta vitamina si la obstrucción biliar ha sido prolongada.  (C. Smelter, G. Bare, L. Hinkle, & H. Chver, 2012)
Valoración y datos diagnósticos.
Rayos x de abdomen: solo en un 15 al 20% de los cálculos se calcifica lo suficiente como para ser visible en tales estudios de rayos x.  (C. Smelter, G. Bare, L. Hinkle, & H. Chver, 2012)
Ultrasonografía: para mostrar el tamaño de los órganos abdominales y la presencia de masa. Es rápida y precisa. La ultrasonografía puede detectar con un 95% de precisión.  (C. Smelter, G. Bare, L. Hinkle, & H. Chver, 2012)
Imágenes de radionucleosidos o colegammagrafia: la colegammagrafia se usa con éxito en el diagnóstico de colecistitis aguda o el bloqueo de un conducto biliar.  (C. Smelter, G. Bare, L. Hinkle, & H. Chver, 2012)
Colecistografía: este se reemplazó por la ultrasonografía como prueba de elección.
Colangiopancreatografia retrograda endoscópica: permite la visualización directa de estructuras que con anterioridad se podían visualizar solo durante la laparotomía.

Tratamiento medico
Los principales objetivos del tratamiento médico son reducir la incidencia de episodios agudos del dolor de la vesícula biliar y la colecistitis mediante un manejo de apoyo y dietético y si es posible eliminar la causa de colecistitis por medio de tratamiento farmacológico, procedimientos endoscópicos o intervención quirúrgica. (C. Smelter, G. Bare, L. Hinkle, & H. Chver, 2012)
Terapia nutricional de apoyo: la dieta se requiere después de un episodio está limitada por lo general a líquidos bajos en grasa.
Tratamiento farmacológico: el ácido ursodesoxicólico (AUDC) y el acido quenodesoxicólogico se usan para disolver cálculos biliares.
Manejo quirúrgico: el manejo de la colecistopatía y cálculos biliares se lleva a cabo para aliviar os síntomas persistentes, para eliminar la causa del calculo biliar y para tratar la colecistitis aguda: (C. Smelter, G. Bare, L. Hinkle, & H. Chver, 2012)
ü  Colecistectomía laparoscópica
ü  Colecistectomía
ü  Minicolecistectomia
ü  Coledocostomia
Intervención posoperatoria de enfermería:
ü  Alivio del dolor
ü  Mejoría del estado respiratorio
ü  Mantenimiento de la integridad tisular
ü  Mejoría  del estado nutricional
ü  Vigilancia y manejo de posible complicaciones
ü  Promoción de la atención domiciliaria.



TRASTORNOS DEL PÁNCREAS
Pancreatitis aguda
La pancreatitis aguda abarca desde u trastorno leve, autolimitadas a un grave, que rápidamente es fatal y no responde a ningún tratamiento. La pancreatitis se caracteriza por edema e inflamación confinados al páncreas (C. Smelter, G. Bare, L. Hinkle, & H. Chver, 2012)
Fisiopatología
La autodigestion del páncreas por sus propias enzimas proteolíticas, sobre todo la antriptisina, causa pancreatitis aguda. 80% de pacientes con pancreatitis aguda tiene enfermedad de las vías biliares o antecedentes de abuso de alcohol de larga duración. Los cálculos entran el colédoco y se alojan en el ámpula de Váter, obstruyendo el flujo del jugo pancreático o causando en reflujo de biliar del colédoco hacia el conducto pancreático, lo que activa las poderosas enzimas dentro del páncreas. (C. Smelter, G. Bare, L. Hinkle, & H. Chver, 2012)
Manifestaciones clínicas
·                       Dolor abdominal grave, en el epigastrio medio generalmente después de una comida muy pesada o ingestión de alcohol y puede ser difuso o difícil de diagnosticar.
·                       Náuseas y vomito.
·                       Es posible que desarrolle fiebre, confusión mental y agitación.
·                       Dolor a la palpación, dolor de espalda.
·                       Hipotensión por hipovolemia.
·                       Heces color arcilla
·                       Llenura abdominal por gases
·                       Hipo
·                       Indigestión
·                       Leve coloración amarillenta de la piel y la esclerótica de los ojos (ictericia)
·                       Erupción o úlcera (lesión) cutánea
·                       Distensión abdominal
Valoración y datos diagnósticos
El diagnostico de pancreatitis aguda se basa en el antecedente de dolor abdominal, presencia de factores de riesgo conocidos, y hallazgos tanto en el examen físico como diagnósticos. Valoración de cifras de amilasa sérica y lipasa. Se pueden obtener rayos x del abdomen y tórax para diferenciar la pancreatitis de otros trastornos que pueden causar síntomas similares y para detectar derrames pleurales. (C. Smelter, G. Bare, L. Hinkle, & H. Chver, 2012)
Tratamiento medico
El tratamiento de la pancreatitis aguda se dirige hacia el alivio de los síntomas y a prevenir o tratar las complicaciones. Se suspenden de todo el consumo oral para inhibir la estimulación del páncreas y su secreción de enzimas. (C. Smelter, G. Bare, L. Hinkle, & H. Chver, 2012)
Manejo del dolor: la adecuada administración de analgésicos es especial durante el curso de la pancreatitis aguda para proporcionar suficiente alivio del dolor y para minimizar la inquietud que puede estimular más la secreción pancreática. (C. Smelter, G. Bare, L. Hinkle, & H. Chver, 2012)
Cuidados intensivos: la corrección de la pérdida de líquidos y sangre y as cifras bajas de albumina es necesaria para mantener el volumen de líquidos y prevenir la insuficiencia renal. (C. Smelter, G. Bare, L. Hinkle, & H. Chver, 2012)
Cuidados respiratorios:  está indicado debido al alto riesgo de elación del diafragma, infiltrados y derrames pulmonares, así como atelectasia.
Drenaje biliar: la colocación de drenajes biliares y endoprotesis en el conducto pancreática a través de endoscopia se realiza para establecer el drenaje del páncreas.
Cuidados de enfermería
-Alivio del dolor y malestar
-Mejoría del patrón respiratorio
-                  Mejoría del estado nutricional
-                  Mantenimiento de la integridad tisular.
-                  Vigilancia y manejo de complicaciones posibles
-                  Promoción de la atención domiciliaria y basada en la comunidad.
Pancreatitis crónica
 La pancreatitis crónica es un trastorno inflamatorio que se caracteriza por la destrucción progresiva del páncreas. Conforme  las células son reemplazadas por tejido fibroso tras los ataques repetitivos de pancreatitis. El resultado es la obstrucción del conducto pancreático principal y colédoco y también del duodeno. Además hay atrofia del epitelio de los conductos, inflamación y destrucción de las células secretoras del páncreas. (C. Smelter, G. Bare, L. Hinkle, & H. Chver, 2012)
El consumo del alcohol y la desnutrición son la causa principal de pancreatitis crónica.  El tabaquismo es otro factor en el desarrollo de pancreatitis crónica.
Manifestaciones clínicas
La pancreatitis crónica se caracteriza por ataques recurrentes de dolor abdominal superior y de espalda intenso acompañados de vómito. A veces los opioides en grandes dosis no proporcionas alivio, y el riego de dependencia aumenta. Algunos pacientes experimentan dolores insoportables y continuos y otros tienen un dolor sordo, molesto, continuo y otras veces suele ser indolora. (C. Smelter, G. Bare, L. Hinkle, & H. Chver, 2012)
          La pérdida de peso es un problema importante en la pancreatitis crónica con más de 80% de los pacientes que por lo común es causada por la disminución del consumo dietético secundario a la anorexia o al temor de que comer precipitara otro ataque.  Se deteriora la digestión, las heces se vuelven frecuentes, espumosas y con mal olor debido al deterioro de la digestión de las grasas, puede ocurrir la calcificación de la glándula y se puede formar cálculos de calcio dentro de los conductos. (C. Smelter, G. Bare, L. Hinkle, & H. Chver, 2012)
Tratamiento medico
El manejo de la pancreatitis crónica depende de su causa probable de cada paciente. El tratamiento se dirige hacia la prevención y manejo de ataque agudos, alivio del dolor y malestar. La manejo de la insuficiencia exocrina y endocrina de la pancreatitis. 

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